Dulce Maestro
Jesús.
Hermano
Amado y Adorado
Hoy
te invito y te pido que entres en mi corazón y en mi vida y te suplico que no
salgas de ahí, aunque mis acciones no sean de tu agrado te suplico, no te
vayas, no me dejes ya que sin ti no soy nada y no podría continuar mi existencia
en esta vida.
Dame
la oportunidad de cambiar
A
partir de hoy haré un espacio en mi corazón para ti y si es pequeño para que
entres, poco a poco contigo dentro será solo para ti, pero no me dejes, no me
abandones, quédate en mi corazón hoy y siempre, rige mis pensamientos y mis
acciones guíame a cada instante.
Hoy
te invito Amado Jesús Hermano mío, Maestro mío a formar parte de mi vida
Hoy
te invito a ser mi vida
Oh!
Amado Jesús hoy camina conmigo de la mano
Amado
Maestro te pido que estés en cada respiración e inhalación
Gracias
Divino Jesús ya que estas en mi vida y mi corazón a partir de ahora y para
siempre.